Hoy presentó su renuncia la directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Urabá. Después de cinco años de gestión, Ángela Hernández deja su cargo y a 125 asociaciones de víctimas que han recibido la noticia de su partida con una doble frustración: porque se va alguien que hizo mucho por ellas y porque creen que la reemplazan por motivos meramente políticos.
Hernández se enteró de que se iría de la Unidad de Víctimas el día que anunciaron que Pinto reemplazaría a Alan Jara en la dirección nacional.
Esa tarde apareció en la página de la Presidencia la hoja de vida de su nuevo reemplazo, María Elizabeth Granada, asesora jurídica de la Brigada 17 del Ejército Nacional (que opera en Urabá) desde hace diez años.
“En Urabá necesitamos una hormiga”
Si Birleida Ballesteros, coordinadora de la Mesa de Víctimas de Antioquia, pudiera pagar para que Ángela Hernández no se fuera de la Unidad de Víctimas, lo haría.
“Ella logró que todos los representantes de víctimas nos sentáramos en una mesa, habláramos de frente y nos coordináramos. Logró en Urabá lo que nadie ha podido. Se metió al pantano con nosotros, hizo que 125 representantes de víctimas nos capacitáramos para hacer valer nuestros derechos. A donde estuviéramos, ahí estaba ‘la hormiga’”.
Entre los logros de Hernández desde el 2012, que empezó en el cargo, están la formalización de denuncias de suplantación de identidad de víctimas para cobrar ayudas humanitarias, la creación del centro regional de atención a víctimas en Apartadó y de otros diez puntos de atención descentralizados en el Urabá antioqueño y chocoano.
En diciembre de 2015 fue reconocida por la exdirectora nacional Paula Gaviria como la mejor directora territorial de la Unidad para las Víctimas. Toda una ‘hormiga’ trabajadora, como dice Ballesteros.
Las víctimas están preocupadas por lo que pueda suceder con ellas. Piensan que un cambio en la dirección de la Unidad significa un retroceso, porque cuando se reemplaza un cargo dentro de la entidad normalmente no hay empalme.
Una representante de Mujeres Víctimas dice que detrás del puesto de Hernández están los liberales, porque tanto Alan Jara como Yolanda Pinto pertenecen a sus filas.
Una fuente local que no nombramos por seguridad, nos confirmó que la dirección de la Unidad de Víctimas siempre ha sido cuota liberal, que a Ángela Hernández la nombró Eugenio Prieto cuando era senador, pero que ahora detrás del cargo estaría una nueva generación de ese partido en Antioquia encabezada por el polémico representante Julián Bedoya.
Según contó el diario El Mundo en ese entonces, Bedoya apoyó la aspiración al Senado de Yolanda Pinto. Sin embargo, y contrario a lo dicho inicialmente en esta nota, al parecer Pinto no está detrás del nombramiento pues se posesiona hasta el lunes 14 de octubre, y es más bien un nombramiento que viene directamente desde Palacio.
Bedoya pasó de obtener 29 votos en el municipio de Carepa en 2011 a 1057 en 2014 y según la fuente local con la que habló La Silla, su candidatura a la Cámara fue apoyada por William Ríos, esposo de la nueva directora territorial de la Unidad de Víctimas.
Ríos es el representante legal de la Sociedad Antioqueña de Transportes Urbanos y Rurales Santur S.A.S., que ha tenido contratos por más de 3 mil millones de pesos con las alcaldías de Turbo, Carepa y Apartadó desde 2014. También tiene una serviteca en Apartadó que desde el año pasado ha tenido contratos con esa Alcaldía y con el hospital Francisco Valderrama de Turbo.
La misma fuente local que por seguridad no mencionamos, nos contó que las empresas de Ríos han financiado las campañas de varios alcaldes del norte de Urabá en la última década, tema que no hemos podido confirmar con otra fuente.
La nueva directora
María Elizabeth Granada es una abogada de la Universidad Cooperativa de Medellín especializada en contratación estatal.
Fue comisaria de Familia de Carepa durante la administración de William Ortiz Palacio quien, según representantes de víctimas de la zona, apoyó a la candidatura del polémico parapolítico conservador Oscar Suárez Mira en las votaciones parlamentarias de 2006 y fue respaldado por la senadora Olga Suárez en su último intento por alcanzar la alcaldía de Carepa en 2015.
Que las víctimas no conozcan a la nueva directora les suena a falta de experticia.
Sin embargo, fuentes que trabajan en el Batallón 17 del Ejército Nacional en Carepa le dieron a La Silla, aunque no muchas, buenas referencias.
Dicen que su trabajo en derechos humanos es significativo a través de los procesos jurídicos que hasta hoy les lleva a los militares; que sabe escuchar y que es responsable en su trabajo, no en vano ha asesorado por muchos años al batallón en temas de contratación.
Lo demás, habrá de verse.
Nota de la Editora: después de publicada esta historia, obtuvimos una nueva información que indicaría que pese a que existe una relación entre el representante Bedoya y Pinto, este cambio en Urabá no obedece a una decisión de la nueva directora de la Unidad para las Víctimas como se podía inferir de la nota.
Fuente: http://lasillavacia.com/historia/las-victimas-de-uraba-otra-cuota-politica-62091